lunes, 23 de febrero de 2009

Me pasé por La Cantina del Puerto...y ya no está


Existen lugares que enseguida se convierten en especiales, a veces sin darnos cuenta…

Hoy como uno de tantos días decidí pasar un buen rato, un rato de amigos, de lectura, de noticias curiosas contadas desde una perspectiva única, y me pasé por La Cantina del Puerto, seguí mi camino habitual dispuesta a sentarme en la mesa del fondo que el cantinero un día reservó para mí, cuál fue mi sorpresa al ver que ya no estaba, -cerrado-, lo primero que pensé es que me había equivocado, sal, vuelve sobre tus pasos, entra…lo mismo, sin acceso.
No sin cierto estupor me pregunto qué ocurre, quizá está cerrado por vacaciones pero no hay cartel que lo indique como en otras ocasiones, fue más fuerte que él, la música, la gente la vida en tierra está muy bien, pero no le basta con ver los barcos desde el ventanal de la cantina, necesita su mar, necesita el azote del viento y el vaivén del oleaje, habrá que esperar entonces a que las letras del pirata lleguen en forma de espuma de mar, quizá no estén bañadas en ron, martini ni cerveza, pero serán siempre brisa fresca para el ánima y el corazón.




Existen lugares que enseguida se convierten en especiales, como el cine de reestreno donde pasábamos tardes enteras viendo una, dos y hasta tres pelis, convertido ahora en un gigante multisala, como la tienda de caramelos a granel donde me compraba un cucurucho de pipas ataviada con mis coletas y mi vestido de los domingos y donde ahora solo puedo elegir que operador de telefonía me ofrece esto o aquello, como mi viejo cole que simplemente quedó solo y vacío… a veces sin darnos cuenta dejan de estar, nos apena, quedamos huecos, pero queda grabada en nuestra memoria, su aroma y su esencia para siempre.

9 comentarios:

  1. hola soy nueva por aqui, me ha llamado la atencion tu blog, y aqui estoy escribiendote...

    Bueno un lugar siempre hay un lugar al cual queremos ir o echamos en falta... y mucha veces no nos podemos mover de donde estamos.Precioso de verda y de mucha reflexion te invito a mi blog un saludo

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  2. No me había dado cuenta del cierre de la cantina, suelo entrar cuando la fuente actualiza en la lista de blogs favoritos y mientras no lo hace, no suelo pasar por allí.
    Espero que el Capi abra cantina en otro sitio, quizá en un puerto diferente, pero que no nos deje sin sus letras y esa brisa del mar.
    Un saludo

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  3. Te saludo Sylvia, porque he descubierto tu blog gracias a la gran amiga Sill. Es una pena que desaparezcan espacios como La cantina del puerto, yo también la tenía como esa parte de uno que nos devuelve a lo más añorado.
    Me tomo la confianza de disfrutar de los colores de tu caja.
    Un abrazo desde Galicia

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  4. Hola Sylvia, me encantó que me visitaras. Más aún ahora, cuando lo que leo en este emotivo post, me identifica tanto contigo...
    Resulta que yo tampoco puedo entrar en la cantina. No sabía que Fredo está así, estuve un tiempo sin bloguear y me he perdido alguna aventura del Gran Capitán. Ahora no puedo acceder para ponerme al día...pero, a cambio, se da la ocasión de conocerte y me alegro.
    Besos desde la isla lunar.

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  5. jo, pero si hace nada que leí la última entrada y... pensé, "luego me paso con calma y le dejo un saludo" pues si que estamos bien.
    Bueno, pues te dejo uno a ti, no sea que se pegue!
    Un beso.

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  6. Bien... yo también suelo ser asiduo a dicha cantina... me encanta ver el mar desde sus ventanales... el olor a salitre... las mesas de madera... y nuestro querido capitán Tormentas... no sé si ha cerrado o más bien que ha puesto una especie de filtro... por lo que hace falta invitación para entrar... personalmente le mandé un e-mail pero aún no ha contestado... espero que todo esté en orden... Un beso. marea@

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  7. Hola Sylvia, gracias por tu visita.
    Me encantó tu blog ...
    Bueno, lo de la Cantina yo ya habia me dado cuenta pero he percebido que cambió de nombre el blog de Fredo y está solo para invitados. Pensé que el habia cerrado para hacer las modificaciones pero parece que no. No sé ...
    Al final de todo también me quedé con esta sensación que habia perdido un lugar especial apesar de no compartir de muchas de las concepciones ideologicas de nuestro amigo.
    Un beso.
    Sill

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  8. Precioso texto Sylvia… de verdad. Aunque claro, siendo uno protagonista del mismo y escrito por tan hermosa mujer, el ego propio se hincho de tal manera que el muñeco de Michelin a mi lado parece anoréxico.
    Y puede estar tranquila vuesa merced, que la cantina simplemente esta en reformas; y en algo tiene razón, quiero volver a navegar aunque sea a través del blog.
    Moitos biquiños

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  9. Hola Sylvia! me gustó tu blog, que linda la música!! precioso :-D la verdad es que tienes cosas muy lindas, de verdad, es una preciosidad :-D

    te dejo mi blog por si lo quieres ver...


    http://elbalcondejaime.blogspot.com

    es de trucos blogger, ayuda blogger, descargas, perros, gatos, agapornis (inseparables), ninfas, canarios, plantas, cocina y recetas y algunas cosillas más.
    Bueno, a ver si te gusta :-D, un gran saludo!

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